Búho real (Bubo bubo) fotografiado tras la puesta de sol antes de iniciar su jornada de caza. |
En estos días tan cortos en los que el sol de pone en tan poco tiempo, a menudo me cuesta decidir donde terminar una ruta guiada, soy consciente de que se trata de un momento de máxima actividad en el que numerosos espectáculos naturales se producen de forma simultánea en diferentes lugares, por ello, elegir donde situarse y cual de esos acontecimientos nos merece más la pena ir a presenciar y pensar de una forma realista que garantías de éxito tenemos en cada uno de los casos.
Ayer estuve guiando en los llanos de Trujillo, cuando se acercaba la puesta del sol y por tanto la hora de finalizar nuestra ruta, tuve que elegir que lugar y que observaciones nos interesaban más, finalmente elegimos ir a ver un grupo de sisones alimentándose al atardecer, para posteriormente observar un enorme dormidero de más de 70 milanos reales, tras hacer estas observaciones y decidir volver vimos la enorme silueta de un búho real que nos pasó volando a muy pocos metros para posarse sobre una antigua construcción donde permaneció menos de dos minutos, pero el tiempo suficiente para que tuviéramos una excelente observación de la más grande de nuestra rapaces nocturnas y pudiera conseguir una foto que puso a prueba mi pulso con la cámara pues no había casi nada de luz y era realmente difícil que la foto no saliera movida. Tras este momento en el que contuvimos casi la respiración, el búho levantó su silencioso vuelo y siguió con su jornada de caza en una zona rica en conejos.
Creo que finalmente me quedó un documento bastante bueno del búho real sobre un tejado junto a los nidos de cigüeña blanca.
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