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jueves, 24 de mayo de 2018

Roquero solitario (Monticola solitarius), una hembra capturando lagartijas colilargas (Psammodromus algirus).


En mis recientes visitas al Parque Nacional de Monfragüe, estoy observando a una hembra de roquero solitario parece ser toda una especialista en la captura de lagartijas colilargas, actualmente se encuentra en plena cría y es muy frecuente ver tanto a la hembra como al macho llevando abundantes y frecuentes cebas entre las que predominan las orugas de varias especies que deben encontrar en las cercanías de su nido.

Pero esta hembra de roquero solitario, demuestra ser especialmente habil en la captura de lagartijas colilargas y las capturas siempre se tratan ejemplares jóvenes pero de un tamaño ya considerable. En las cuatro últimas visitas que he hecho por la mañana, he podido observar a esta hembra con una lagartija en su pico, un día tras otro y la misma escena se volvía a repetir.

Mis visitas a este lugar de Monfragüe no suelen ser demasiado largas, rara vez más tiempo de una hora y media, pero en los últimos días han sido casí siempre a la misma hora, en cuatro ocasiones he podido observar a esta hembra con portando una lagartija recien capturada con una sorprendente puntualidad, entre 11:05 las y las 11:20 horas, que es cuando el sol empieza a calentar esa parte del roquedo y las lagartijas empiezan a activarse y tomar los primeros rayos de sol, siendo precisamente a esas primeras horas más fáciles de capturar.
 





En la fotografía se puede apreciar al macho en su cantadero y a la hembra portando una lagartija colilarga.
Macho de roquero solitario en su lugar de canto habitual.


Macho de roquero solitario portando orugas de diferentes especies en su pico.

Macho de roquero solitario portando orugas de diferentes especies en su pico.

martes, 2 de febrero de 2016

Observando aves en el castillo de Montanchez

 
El pasado domingo 30 de enero estuve en el Castillo de Montanchez desde primera hora de la mañana. Mi objetivo era pasar un rato agradable observando aves y buscar al pequeño grupo acentores alpinos que cada año vienen a pasar el invierno a este lugar.
El castillo de Montanchez se encuentra situado sobre un cerro granítico situado sobre la población del mismo nombre, con una altitud aproximada de 759 m.s.n.m, estos castillos y construcciones situadas en lugares elevados como es el caso de Montanchez son lugares con un potente atractivo para aves como el acentor alpino durante los meses del invierno.
 
En esta ocasión tarde un buen rato en localizar a los acentores, pero mientras tanto me entretuve con otras aves comunes que suelen encontrarse en el castillo y su entorno como abubillas, roqueros solitarios, colirrojo tizón, escribano montesino, avión roquero entre otros, mientras buscaba a los acentores estuve observando a una interesante bandada de fringílidos que buscada semillas en una zona de pasto desbrozado dentro del propio recinto del castillo, esta numerosa y diversa bandada estaba compuesta principalmente por verdecillos, pardillo común, jilguero, verderón común y pinzón vulgar. En los cercanos olivares situados bajo el castillo pude observar  numerosas currucas capirotadas, alguna curruca cabecinegra y zorzales comunes además de un par de zorzales alirrojos.
Finalmente aparecieron los acentores alpinos, moviéndose entre las piedras y posándose en los muros del propio castillo, pude tomar algunas fotos y observarlos muy bien durante bastante tiempo hasta que apareció un gavilán que provocó una desbandada en el grupo de los fringílidos, lo que hizo que los acentores volasen a zonas menos expuestas, minutos después volví a localizarles pero mucho más lejos.

El acentor alpino me resulta un ave muy especial, he disfrutado mucho observándoles en la cordillera Cantábrica y haciendo duras caminatas buscando a los escasos acentores alpinos que viven junto a los neveros en las zonas de alta montaña de Gredos. Poder disfrutar de este ave, de una forma tan accesible y cercana a casa durante los meses del invierno me parece todo un privilegio. Este pájaro siempre me trae buenos recuerdos.
 
 
 
 
 
Durante la bajada me detuve a observar un precioso macho de roquero solitario que estaba posado sobre el tejado de una casa rodeado de gorriones comunes. 
 

martes, 19 de noviembre de 2013

Un paseo ornitológico por Alange y el Castillo de la Culebra

Aprovechando que está mañana tenías que ir a Mérida con motivo de una reunión, no he podido resistirme a salir temprano y hacer una visita al entorno de Alange y de paso subir al Castillo de la Culebra.

 
Dado que no tenía mucho tiempo, el paseo solo ha podido ser de poco más de una hora pero a pesar de su corta duración, ha sido muy productivo en lo ornitológico.

Entre las especies observadas destaca sin duda la collalba negra, de la que podría decir que es hasta localmente común en esta zona, en total he observado 7 ejemplares (5 machos y dos hembras), incluso en un momento he llegado a observar tres a las vez a muy corta distancia, lo que me ha permitido sacar alguna que otra foto aceptable.


Collalba negra (macho)

 Collalba negra (hembra)

Otras observaciones de interés esta mañana han sido dos vencejos pálidos que han volado sobre el castillo de la Culebra ¡en pleno Noviembre!, también resulta curioso que aproximadamente 35 aviones comunes y joven de golondrina daúrica estuvieran todavía volando por la cálida y soleada ladera sur, ladera donde gracias a la cantidad de acebuches, olivos y lentiscos en plena maduración, mantenían una gran cantidad de pequeñas aves más comunes.

Siempre digo que este lugar tiene algo especial, aquí podemos encontrar una buena densidad de collalba negra en comparación con otras zonas similares en Extremadura, hay presencia en invierno de aves que por lo general deberían haberse marchado ya hacia sus zonas de invernada en África, quizás las cálidas temperaturas de estas sierras situadas en el centro de la provincia de Badajoz puedan explicar esto, y por último, en esta sierra se pueden observar las 5 especies de vencejos que crían en la península ibérica, el vencejo real que cuenta con una interesante colonia en la zona, vencejos comunes y pálidos, el raro vencejo cafre que puede ser observado aquí desde finales de Abril hasta mediados de octubre como norma general y todavía más raro y escaso el vencejo moro que ya lleva los dos últimos veranos dejándose ver por aquí, sin olvidarnos del águila perdicera, que aunque hoy no la he visto, suele ser frecuente por aquí.